sábado, 10 de diciembre de 2011

para alumnos del 2do parcial ,elaborar una sintesis del tema en computadora con todos los requisitos establecidos y entregarlo la primera clase de la semana entrante

LOS VALORES MORALES Y LOS VALORES POLÍTICOS

Weber concibió el problema de la relación entre la ética y la política recurriendo a la distinción entre la ética de la convicción y la ética de las consecuencias. Si actuamos de acuerdo con la primera, nos guiamos por máximas, si dirigimos nuestra conducta de acuerdo con la segunda, tenemos que examinar cuáles son los efectos de nuestra acción.
Para Weber, la ética no puede eludir el hecho de que para conseguir fines buenos hay que contar con medios moralmente dudosos, o al menos peligrosos, y con la posibilidad e incluso la probabilidad de obtener consecuencias moralmente reprochables. Ninguna ética del mundo puede resolver cuándo y en qué medida pueden ser sacrificados los medios y las consecuencias laterales moralmente peligrosos, en virtud de un fin moralmente bueno.
La pregunta principal sobre las relaciones entre ética y política es: ¿el fin justifica los medios? Esta pregunta ha tenido varias respuestas. Así, para Maquiavelo, el fin justifica los medios. Esto significa que las acciones políticas no pueden ser juzgadas moralmente como buenas o malas. Los medios no tienen un valor en sí mismos, éste les es otorgado por los resultados que se obtienen con la acción. La originalidad de Maquiavelo radicaría en sostener la doctrina de la doble moral: existe una moral para los soberanos y otra moral para los súbditos:
Y ha de tenerse presente que un príncipe, y sobre todo un príncipe nuevo, no puede observar todas las cosas gracias a las cuales los hombres son considerados buenos, porque a menudo, para conservarse en el poder, se ve arrastrado a obrar contra la fe, la caridad, la humanidad y la religión. Es preciso, pues, que tenga una inteligencia capaz de adaptarse a todas las circunstancias, y que, como he dicho antes, no se aparte del bien mientras pueda, pero que, en caso de necesidad, no titubee en entrar en el mal (El Príncipe)
Según un punto de vista opuesto al de Maquiavelo, la política y la moral no pueden separarse. Para los defensores de este punto de vista, la justificación moral de los medios por los fines es negativa. Esta posición suele ser llamada deontológica y defiende que hay acciones, a pesar de la bondad de sus fines, que no pueden ser justificadas bajo ninguna circunstancia.
Ello se debe a que los individuos tienen ciertos derechos que obligan a aquellos que tienen el poder a tratarlos como fines y no exclusivamente como medios. Por otro lado, los que sustentan el poder también tienen ciertas obligaciones de acuerdo al puesto que ocupan, el cual les impide, prima facie, e independientemente de las consecuencias, llevar a cabo ciertas acciones. Los derechos y las obligaciones son el origen de las máximas que deberían ser respetadas independientemente de los fines propuestos. Algunas de estas máximas se refieren a la integridad física, moral y social de las personas. Finalmente, el límite del poder se encuentra en los derechos de los individuos, pero los que sustentan el poder piensan más en términos de lo que estánhaciendo que en sus consecuencias.
Weber vislumbró el problema en el que podemos caer si adoptamos una ética de la convicción: podemos transformarnos en profetas quiliásticos, es decir, en un tipo de personas que, por ejemplo, al defender de una manera absoluta ciertos derechos no caen en la cuenta de que están violando otros.
Con respecto a las relaciones entre ética y política podemos distinguir tres posiciones: a) integrismo ético, según el cual ética y política son dos realidades opuestas y, al tener que elegir una de ellas, la elección ha de recaer en la ética; b) realismo político, según el cual, en el caso de oposición entre moral y política, la elección debe recaer en la política, sacrificando los principios éticos; c) postura sintética entre las dos realidades.
Integrismo ético
La política ha sido considerada con frecuencia como el lugar de cita de la hipocresía, la mentira, el engaño y demás vicios contrarios a la limpia ejecutoria del hombre moral. Más aún, la política en sí misma ha sido vista como realidad contraria a la ética y, consiguientemente, como un asunto inmoral. Entre las posturas que por motivos de integridad moral rechazan la política destacan cuatro:
  1. El rechazo burgués: nace de la reducción individualista de la moral y conduce a considerar y a hacer de la política un "juego sucio" en el cual los políticos han de claudicar inevitablemente de sus principios éticos.
  2. El rechazo anarquista: nace de la absoluta desconfianza ante toda forma de poder ("ni Dios ni amo") y conduce a buscar la solución de los problemas de la clase obrera en la actuación directa de los afectados.
  3. El rechazo marxista: (del marxismo "ortodoxo"), según el cual las estructuras políticas pertenecen a la etapa alienada de la humanidad, supraestructuras que desaparecerán necesariamente en la etapa final, en la que la sociedad civil encontrará su perfecta identificación.
  4. El rechazo del fundamentalismo religioso: algunas sectas e iglesias protestantes consideran que la religión prohíbe la injerencia de sus fieles en los asuntos políticos, con el argumento de que estos fieles "viven en el mundo, pero no son del mundo".
Realismo político
El "realismo político" coincide con el "integrismo político" en que ética y política son irreconciliables. Pero se distinguen en la toma de postura: mientras que el integrismo moral opta por la ética, el realismo político prefiere sacrificar los principios morales en bien de los intereses políticos.
Los "realistas" y los "realismos" abundan en la historia de la acción y de la doctrina política. El teórico más notable de esta corriente es Maquiavelo. Otros propugnarán la autonomía total de la política y considerarán la acción política como norma de sí misma, exigiendo la eliminación de cualquier referencia a la moral. Hegel llegará a identificar el "ser" y el "deber" en la categoría del "Estado ético".
No escapan de los presupuestos y de las conclusiones del realismo político la mayor parte de los sociólogos y cultivadores de la ciencia política (Weber y Pareto incluidos). La pretensión de una ciencia política regida únicamente por leyes estrictamente técnicas, es decir, éticamente neutrales, debe considerarse como una forma más de realismo político, en el que entran por igual la virtú maquiavélica o la "razón de Estado".
La "razón de Estado" es un principio de legalidad que se atribuye al Estado político, y que éste ejerce en casos excepcionales, recurriendo a medidas que se hallan más allá, o están al margen, de la legalidad comúnmente admitida. El procedimiento concreto de actuación se somete al secreto, y se argumenta aduciendo el interés supremo del Estado. Las teorías que defienden la razón de Estado provienen del siglo XVII y se refieren inicialmente a la actuación política del cardenal Richelieu, que subordina la religión a la política, pero el descubridor del concepto es Maquiavelo, que en El Príncipe y los Discursos, atribuye al Estado la misma dignidad que la religión o la ley, pudiendo por ello no estar sometido a estas y guiarse por razones exclusivamente propias. La constitución de los estados democráticos, que sitúa la soberanía en el mismo ciudadano, quita fuerza a la argumentación, y plantea la cuestión del sometimiento del poder a la legalidad vigente y a la ética.
Síntesis: la moralización de la política
Entre los intentos que se han llevado a cabo para conciliar política y ética destacan los siguientes:
  1. Moralización del "Príncipe", partiendo de la base de que, moralizando al sujeto principal del poder, todo el sistema quedaría moralizado.
  2. Moralización de la política mediante el control de la religión.
  3. Moralización de las estructuras políticas merced a sistemas de autocontrol de las mismas estructuras (división de poderes, participación popular, Constitucionalismo, Estado de derecho, etc.)
Moralización del "tacitismo" de los siglos XVI y XVII: el tacitismo entra en diálogo con Maquiavelo y acepta su planteamiento realista de la política. Pero cree superarlo haciendo ver, por una parte, el valor políticamente útil de la virtud, con su función pragmática: la verdadera razón oconveniencia del Estado necesita imprescindiblemente de la virtud moral. Los gobernantes malos son siempre, en definitiva, malos gobernantes.
  • Moralización burguesa y "moralista": consiste en la acomodación de la conciencia moral, es decir, en componérselas casuísticamente para que el comportamiento elegido satisfaga, a la vez, a la exigencia ética y a la instancia política. Con "manga ancha" y una cierta "mala fe" siempre se puede llegar a un "compromiso" tranquilizador de la conciencia.

  • EL PAPEL DE UNA ÉTICA POLÍTICA EN UNA SOCIEDAD DEMOCRÁTICA

    Suponiendo que el esquema político democrático es un esquema irrenunciable, las funciones que, según la filosofía política y la ética, debe cumplir la ética política en una sociedad democrática son:
    1. La primera función consiste en relacionar la legitimación con la justicia. Una institución es legal simplemente por ajustarse a las leyes, pero su legitimidad sólo se da cuando las leyes que la dotan de legalidad se consideran a su vez dignas de ser obedecidas por haberse elaborado conforme a un procedimiento aceptable por todos. En nuestra sociedad democrática este procedimiento es la decisión mayoritaria. Ahora bien, el ajuste a ese procedimiento no implica necesariamente la justicia de una decisión legislativa. La ética debe permitir ese juicio sobre una base que no discuta los principios democráticos.
    2. Una ética democrática debe preservar la convivencia de todos los valores presentes en la sociedad (incluso de los minoritarios), pero fundamentalmente, debe ser capaz de articular los tres valores fundamentales de la democracia: vida, libertad e igualdad.
    3. La ética es el instrumento que permitirá el control social de los gobernantes. El control extra-político de la acción política es imprescindible para la salud democrática, y no sería posible si la ética no proporcionase una puente entre el sentir social y los políticos, y, lo que es más importante, una base aceptada desde la que argumentar, un punto de referencia para ejercer ese control.
    4. La sociedad debe mantener una valoración de la actividad política (para garantizar la retroalimentación que exigíamos en el epígrafe anterior) y de la acción de gobierno. Y ese marco valorativo debe ser establecido por la ética política.
    5. Partiendo de que los fines comunes son seleccionados democráticamente y luego encomendada su realización al político, la ética debe permitir decidir, supuesta la deseabilidad del resultado, el modo en que va a realizarse.
    6. La ética política debe dar razones para la acción a cada agente político. Esto es, convencer racionalmente a cada agente de la obligatoriedad de sus compromisos políticos y de la inderogabilidad de los fines comunes. Así, una ética política debe proveer razones (normas) gracias a las cuales el legislador se sienta íntimamente comprometido con su tarea política y no renuncie a los fines socialmente determinados, el súbdito encuentrejustificada su obediencia a leyes justas a la vez que halle argumentos para oponerse a las injustas, etc.

    tarea para alumnos del 1er parcial, elaborar un resumen del tema en computadora con todos los requisitos establecidos y entregar la primer clases de la semana entrante.

    Eutananacia
    Eutanasia, según indica el DRAE, es la acción u omisión que, para evitar sufrimientos a los pacientes desahuciados, acelera su muerte con su consentimiento o sin él. También indica el DRAE que eutanasia es la muerte sin sufrimiento físico. La palabra deriva del griego: ευ eu (‘bueno’) y θάνατος thanatos (‘muerte’).[1]
    Para la catedrática Marina Gascón Abellán la eutanasia consiste en provocar la muerte de otro por su bien, lo cual conduce necesariamente a acotar las circunstancias y supuestos (mayoritariamente ligados al contexto médico-asistencial) que dan sentido a esta actuación humanitaria, piadosa y compasiva. Para Gascón el elemento central que define la eutanasia no es la concurrencia o ausencia del consentimiento del sujeto que muere, ni la modalidad activa u omisiva de la conducta que provoca la muerte, sino los móviles que la animan.[2]
    La eutanasia tiene por finalidad evitar sufrimientos insoportables o la prolongación artificial de la vida a un enfermo. Para que la eutanasia sea considerada como tal, el enfermo ha de padecer, necesariamente, una enfermedad terminal o incurable, y en segundo lugar, el personal sanitario ha de contar expresamente con el consentimiento del enfermo.

    Clasificaciones de eutanasia

    En el medio hispanohablante se han introducido conceptos de la evaluación ética de la eutanasia y se la califica de directa o indirecta en cuanto existe o no la intención de provocar primariamente la muerte en las acciones que se realizan sobre el enfermo terminal. En el contexto anglosajón, se distingue entre la eutanasia como acción y la eutanasia como omisión (dejar morir). Su equivalente sería eutanasia activa y eutanasia pasiva, respectivamente. También se utilizan, en forma casi sinónima, las calificaciones de positiva y negativa respectivamente.
    Sin embargo, la
    Organización Médica Colegial española y otras instituciones no aceptan la distinción terminológica entre «activa» y «pasiva», porque lleva a confusión. Consideran que la eutanasia es siempre deontológicamente condenable. Cosa bien distinta puede ser el acto médico de suspender un tratamiento inútil.[3]
    1. Eutanasia directa: Adelantar la hora de la muerte en caso de una enfermedad incurable, esta a su vez posee dos formas:
    a) Activa: Consiste en provocar una muerte indolora a petición del afectado; el caso más frecuentemente mostrado es el cáncer, pero pueden ser también enfermedades incurables como el sida. Se recurre, como se comprende, a sustancias especiales mortíferas o a sobredosis de morfina.
    b) Pasiva: Se deja de tratar una complicación, por ejemplo una bronconeumonía, o de alimentar por vía parenteral u otra al enfermo, con lo cual se precipita el término de la vida; es una muerte por omisión. De acuerdo con Pérez Varela[cita requerida
    ] «la eutanasia pasiva puede revestir dos formas: la abstención terapéutica y la suspensión terapéutica. En el primer caso no se inicia el tratamiento y en el segundo se suspende el ya iniciado ya que se considera que más que prolongar el vivir, prolonga el morir». Debe resaltarse que en este tipo de eutanasia no se abandona en ningún momento al enfermo.
    2. Eutanasia indirecta: Consiste en efectuar procedimientos terapéuticos que tienen como efecto secundario la muerte, por ejemplo la sobredosis de analgésicos, como es el caso de la morfina para calmar los dolores, cuyo efecto agregado, como se sabe, es la disminución de la conciencia y casi siempre una abreviación de la vida. Aquí la intención, sin duda, no es acortar la vida sino aliviar el sufrimiento, y lo otro es una consecuencia no deseada. Entra así en lo que desde Tomás de Aquino se llama un problema de doble efecto, que resulta previsto pero no buscando que sea adelantada la muerte del paciente.

    Otros conceptos relacionados

    Suicidio asistido

    : Significa proporcionar en forma intencional y con conocimiento a una persona los medios o procedimientos o ambos necesarios para suicidarse, incluidos el asesoramiento sobre dosis letales de medicamentos, la prescripción de dichos medicamentos letales o su suministro. Se plantea como deseo de extinción de muerte inminente, porque la vida ha perdido razón de ser o se ha hecho dolorosamente desesperanzada. Cabe destacar, que en este caso es el paciente el que voluntaria y activamente termina con su vida, de allí el concepto de suicidio. El 17 de marzo de 2010, el Parlamento de Andalucía (España) aprueba esta ley, primer referente en España.
    Cacotanasia: Es la eutanasia que se impone sin el consentimiento del afectado. La palabra apunta hacia una mala muerte (kakós: malo)[4]
    Ortotanasia: Consiste en dejar morir a tiempo sin emplear medios desproporcionados y extraordinarios. Se ha sustituido en la terminología práctica por muerte digna, para centrar el concepto en la condición (dignidad) del enfermo terminal y no en la voluntad de morir.
    Distanasia: Consiste en el «encarnizamiento o ensañamiento terapéutico», mediante el cual se procura posponer el momento de la muerte recurriendo a cualquier medio artificial, pese a que haya seguridad de que no hay opción alguna de recuperar la salud, con el fin de prolongar la vida del enfermo a toda costa, llegando a la muerte en condiciones inhumanas. Normalmente se hace según los deseos de otros (familiares, médicos) y no según el verdadero bien e interés del paciente.

    Historia

    La eutanasia no es algo nuevo. Está ligada al desarrollo de la medicina moderna. El solo hecho de que el ser humano esté gravemente enfermo ha hecho que en algunas distintas sociedades la cuestión quede planteada. La eutanasia es un problema persistente en la historia de la humanidad en el que se enfrentan ideologías diversas.
    La eutanasia no planteaba problemas morales en la antigua

    Grecia: la concepción de la vida era diferente. Una mala vida no era digna de ser vivida y por tanto ni el eugenismo, ni la eutanasia suscitaban grandes discusiones. Hipócrates representa una notable excepción: prohíbe a los médicos la eutanasia activa y la ayuda para cometer suicidio.
    Durante la Edad Media se produjeron cambios frente a la muerte y al acto de morir. La eutanasia, el suicidio y el aborto bajo la óptica de creencias religiosas cristianas son considerados como «pecado», puesto que la persona no puede disponer libremente sobre la vida, que le fue dada por Dios. El arte de la muerte (ars moriendi), en la cristiandad medieval, es parte del arte de la vida (ars vivendi); el que entiende la vida, también debe conocer la muerte. La muerte repentina (mors repentina et improvisa), se consideraba como una muerte mala (mala mors). Se quiere estar plenamente consciente para despedirse de familiares y amigos y poder presentarse en el más allá con un claro conocimiento del fin de la vida.
    La llegada de la modernidad rompe con el pensamiento medieval, la perspectiva cristiana deja de ser la única y se conocen y se discuten las ideas de la Antigüedad clásica. La salud puede ser alcanzada con el apoyo de la técnica, de las ciencias naturales y de la medicina.
    Hay pensadores que justifican el término activo de la vida, condenado durante la Edad Media. El filósofo inglés Francis Bacon, en 1623, es el primero en retomar el antiguo nombre de eutanasia y diferencia dos tipos: la «eutanasia exterior» como término directo de la vida y la «eutanasia interior» como preparación espiritual para la muerte. Con esto, Bacon se refiere, por una parte, a la tradición del «arte de morir» como parte del «arte de vivir», pero agrega a esta tradición algo que para la Edad Media era una posibilidad inimaginable: la muerte de un enfermo ayudado por el médico. Tomás Moro, en la Utopía (1516), presenta una sociedad en la que los habitantes justifican el suicidio y también la eutanasia activa, sin usar este nombre.
    Para Bacon, el deseo del enfermo es un requisito decisivo de la eutanasia activa; la eutanasia no puede tener lugar contra la voluntad del enfermo o sin aclaración:
    Quien se ha convencido de esto, quien termina su vida, ya sea voluntariamente a través de la abstención de recibir alimentos o es puesto a dormir y encuentra salvación sin darse cuenta de la muerte. Contra su voluntad no se debe matar a nadie, se le debe prestar cuidados igual que a cualquier otro.
    El darwinismo social y la eugenesia son temas que también comienzan a debatirse. En numerosos países europeos se fundan, a comienzos del siglo XX, sociedades para la eutanasia y se promulgan informes para una legalización de la eutanasia activa. En las discusiones toman parte médicos, abogados, filósofos y teólogos.
    La escasez económica en tiempos de la
    primera guerra mundial sustenta la matanza de lisiados y enfermos mentales. La realidad de los programas de eutanasia ha estado en contraposición con los ideales con el que se defiende su implementación. Por ejemplo, los médicos durante el régimen nazi hacían propaganda en favor de la eutanasia con argumentos tales como la indignidad de ciertas vidas que por tanto eran, según aquella propaganda, merecedoras de compasión,[cita requerida] para conseguir así una opinión pública favorable a la eliminación que se estaba haciendo de enfermos, considerados minusválidos y débiles (Aktion T-4) según criterios médicos. Por eso, ante la realidad de los crímenes médicos durante el régimen nazi, en los Juicios de Núremberg (1946 – 1947) se juzgó como criminal e inmoral toda forma de eutanasia activa y además se estableció de manera positiva, es decir expresamente, que es ilegal todo tipo de terapia y examen médico llevado a cabo sin aclaración y consentimiento o en contra de la voluntad de los pacientes afectados.
    En el presente, se sustentan diferentes opiniones sobre la eutanasia y son variadas las prácticas médicas y las legalidades en los distintos países del mundo. En general en los hospitales, los profesionales de
    medicina paliativa, en residencias especializadas en el tratamiento de enfermos terminales (hospice en inglés), en los domicilios particulares, y también los grupos de autoayuda, trabajan por la humanización en el trato con los moribundos y quieren contribuir a superar la distancia entre la vida, la muerte y las prácticas médicas.
    Estos son algunos de los hechos históricos que se producen en un ámbito fundamentalmente público. Poco investigadas y mucho menos conocidas son las diferentes prácticas reales de las personas frente al acto de morir. Se sabe que hasta fines del siglo XIX en América del Sur existía la persona del «despenador» o «despenadora», encargada de hacer morir a los moribundos desahuciados a petición de los parientes.[cita requerida]

    Sobre la dignidad de la vida humana

    El concepto de «dignidad humana» se invoca tanto para defender la eutanasia como para rechazarla.
    Así, para los defensores de la eutanasia, la dignidad humana del enfermo consistiría en el derecho a elegir libremente el momento de la propia muerte; para sus detractores, la dignidad humana obliga a oponerse a la eutanasia, por considerarlo una arbitrariedad humana frente a un problema moral, ya sea fundamentado en la religión (la elección de la muerte es una decisión exclusivamente divina) o en principios de carácter laico e incluso ateos.
    Evidentemente, tras este uso equívoco del término «dignidad humana» subyacen distintas concepciones del ser humano, de la libertad, de la ciencia médica y del conjunto de los derechos humanos.

    Argumentos a favor

    Médicos

    • Desde siempre, los médicos han participado en la toma de decisiones sobre el fin de la vida y actualmente es común suspender o no instaurar tratamientos en determinados casos, aunque ello lleve a la muerte del paciente. Sin embargo, a veces los médicos deciden por su propia parte si el paciente debe morir o no y provocan su muerte, rápida y sin dolor. Es lo que se conoce como limitación del esfuerzo terapéutico, limitación de tratamientos o, simplemente, eutanasia agresiva. Normalmente la eutanasia se lleva a cabo con el conocimiento y anuencia de los familiares y/o curadores del paciente.[cita requerida]
    • En medicina, el respeto a la autonomía de la persona y los derechos de los pacientes son cada vez más ponderados en la toma de decisiones médicas.
    • En sintonía con lo anterior, la introducción del consentimiento informado en la relación médico-paciente, y para éstas situaciones, la elaboración de un documento de voluntades anticipadas sería una buena manera de regular las actuaciones médicas frente a situaciones hipotéticas donde la persona pierda total —o parcialmente— su autonomía para decidir, en el momento, sobre las actuaciones médicas pertinentes a su estado de salud.

    Jurídicos

    • La despenalización de la eutanasia no significa obligatoriedad absoluta. No se puede imponer el criterio de un conglomerado al ordenamiento jurídico de todo un territorio, por lo que el derecho debiera asegurar los mecanismos para regular el acceso a la eutanasia de los pacientes interesados que cumplan unos requisitos especificados legalmente; así como de la legalidad y transparencia de los procedimientos.
    • La sociedad moderna basa su ordenamiento jurídico en la protección de los derechos humanos. En este sentido, cada enfermo tiene derecho a decidir, informadamente, sobre los asuntos que pertenecen a una esfera tan privada como su cuerpo; y en virtud de esto, decidir cómo quiere seguir -o no seguir- viviendo.

    Para alumnos que deben el 1er.parcial, deben de elaborar cuadro sinóptico del tema de decisiones del video y entregar la proxima clase con todos los requisitos establecidos y en computadora.

    domingo, 13 de noviembre de 2011

    Elaborar un comentario sobre el video de educación, presentarlo en comoutadora y que tenga los 4 requisitos establecidos, entregar el 16,17 y 18 de Noviembre en la íltima clase de la semana.

    Para todos los grupos de 3er semestre. Instrucciones:elaborar cuadro sinóptico de la información sobre educación,en computadora y que tenga los requisitos establecidos.entregar el 16,17 y 18 de noviembre de acuardo al calendario de clases

    Educación

    La educación, (del latín educere "guiar, conducir" o educare "formar, instruir") puede definirse como:
    • El proceso multidireccional mediante el cual se transmiten conocimientos, valores, costumbres y formas de actuar. La educación no sólo se produce a través de la palabra, pues está presente en todas nuestras acciones, sentimientos y actitudes.
    • El proceso de vinculación y concienciación cultural, moral y conductual. Así, a través de la educación, las nuevas generaciones asimilan y aprenden los conocimientos, normas de conducta, modos de ser y formas de ver el mundo de generaciones anteriores, creando además otros nuevos.
    • Proceso de socialización formal de los individuos de una sociedad.
    • La educación se comparte entre las personas por medio de nuestras ideas, cultura, conocimientos, etc. respetando siempre a los demás. Ésta no siempre se da en el aula.
    Existen tres tipos de educación: la formal, la no formal y la informal. La educación formal hace referencia a los ámbitos de las escuelas, institutos, universidades, módulos, mientras que la no formal se refiere a los cursos, academias, e instituciones, que no se rigen por un particular currículo de estudios, y la educación informal es aquella que fundamentalmente se recibe en los ámbitos sociales, pues es la educación que se adquiere progresivamente a lo largo de toda la vida.

    historia

    La historia de la educación se ciñe a la división de las edades del hombre. En los inicios de la Edad Antigua hay que situar las concepciones y prácticas educativas de las culturas india, china, egipcia y hebrea. Durante el primer milenio a.C. se desarrollan las diferentes paideias griegas (arcaica, espartana, ateniense y helenística). El mundo romano asimila el helenismo también en el terreno docente, en especial gracias a Cicerón quien fue el principal impulsor de la llamada humanitas romana.
    El fin del Imperio romano de Occidente (476) marca el final del mundo antiguo y el inicio de la larga Edad Media (hasta 1453, caída de Constantinopla ante las tropas turcas, bien hasta 1492, descubrimiento de América). El cristianismo, nacido y extendido por el Imperio romano, asume la labor de mantener el legado clásico, tamizado, filtrado por la doctrina cristiana.
    De la recuperación plena del saber de Grecia y Roma que se produce durante el Renacimiento nace el nuevo concepto educativo del Humanismo a lo largo del siglo XVI, continuado durante el Barroco por el disciplinarismo pedagógico y con el colofón ilustrado del siglo XVIII.
    En la educación Contemporánea (siglos XIX-XXI) nacerán los actuales sistemas educativos, organizados y controlados por el Estado.

    La educación básica
    Preescolar, educación primaria y secundaria es la etapa de formación de los individuos en la que se desarrollan las habilidades del pensamiento y las competencias básicas para favorecer el aprendizaje sistemático y continuo, así como las disposiciones y actitudes que regirán su vida. Lograr que todos los niños, las niñas y adolescentes del país tengan las mismas oportunidades de cursar y concluir con éxito la educación básica y que logren los aprendizajes que se establecen para cada grado y nivel son factores fundamentales para sostener el desarrollo de la nación.
    En una educación básica de buena calidad el desarrollo de las competencias básicas y el logro de los aprendizajes de los alumnos son los propósitos centrales, son las metas a las cuales los profesores, la escuela y el sistema dirigen sus esfuerzos.
    Permiten valorar los procesos personales de construcción individual de conocimiento por lo que, en esta perspectiva, son poco importantes los aprendizajes basados en el procesamiento superficial de la información y aquellos orientados a la recuperación de información en el corto plazo.
    Una de las definiciones más interesantes nos la propone uno de los más grandes pensadores, Aristóteles: "La educación consiste en dirigir los sentimientos de placer y dolor hacia el orden ético."
    También se denomina educación al resultado de este proceso, que se materializa en la serie de habilidades, conocimientos, actitudes y valores adquiridos, produciendo cambios de carácter social, intelectual, emocional, etc. en la persona que, dependiendo del grado de concienciación, será para toda su vida o por un periodo determinado, pasando a formar parte del recuerdo en el último de los casos

    Objetivos
    • Incentivar el proceso de estructuración del pensamiento, de la imaginación creadora, las formas de expresión personal y de comunicación verbal y gráfica.
    • Favorecer el proceso de maduración de los niños en lo sensorio-motor, la manifestación lúdica y estética, la iniciación deportiva y artística, el crecimiento socio afectivo, y los valores éticos.
    • Estimular hábitos de integración social, de convivencia grupal, de solidaridad y cooperación y de conservación del medio ambiente.
    • Desarrollar la creatividad del individuo.
    • Fortalecer la vinculación entre la institución educativa y la familia.
    • Prevenir y atender las desigualdades físicas, psíquicas y sociales originadas en diferencias de orden biológico, nutricional, familiar y ambiental mediante programas especiales y acciones articuladas con otras instituciones comunitarias.

    La educación es un proceso de socialización y endoculturación de las personas a través del cual se desarrollan capacidades físicas e intelectuales, habilidades, destrezas, técnicas de estudio y formas de comportamiento ordenadas con un fin social (valores, moderación del diálogo-debate, jerarquía, trabajo en equipo, regulación fisiológica, cuidado de la imagen, etc.).
    En muchos países occidentales la educación escolar o reglada es gratuita para todos los estudiantes. Sin embargo, debido a la escasez de escuelas públicas, también existen muchas escuelas privadas y parroquiales.
    La función de la educación es ayudar y orientar al educando para conservar y utilizar los valores de la cultura que se le imparte (p.e. la occidental -democrática y cristiana-), fortaleciendo la identidad nacional. La educación abarca muchos ámbitos; como la educación formal, informal y no formal.
    Pero el término educación se refiere sobre todo a la influencia ordenada ejercida sobre una persona para formarla y desarrollarla a varios niveles complementarios; en la mayoría de las culturas es la acción ejercida por la generación adulta sobre la joven para transmitir y conservar su existencia colectiva. Es un ingrediente fundamental en la vida del ser humano y la sociedad y se remonta a los orígenes mismos del ser humano. La educación es lo que transmite la cultura, permitiendo su evolución.
    En azul podemos observar los países desarrollados (es decir, los que tienen una buena educación). En estos países la educación es gratuita y a los chicos/as se le dan muchas oportunidades de tener un buen presente.

    Educación a lo largo de la vida

    En algunos países como México la educación se divide en dos o más tipos, éstos a su vez se subdividen en niveles tales como Educación Básica (nivel Preescolar, Nivel Primaria, Nivel Secundaria), Educación Media (Preparatoria) y Educación superior (Licenciatura y posgrado). Las divisiones varían según las políticas educativas de cada país
    Existen diversos conceptos que intentan analizar el fenómeno educativo, en relación al discurrir temporal en las personas. Así, conceptos como educación permanente, educación continua , Andragogía o educación de adultos tienen aspectos comunes pero también matices importantes que los diferencian y los enriquecen.
    Según estudios, los niños de ocho años aprenden mejor premiando su desarrollo y no atienden a los castigos mientras los de doce, al contrario, aprenden más al reaccionar de forma negativa ante sus errores. Los adultos también siguen esta norma general y observan más sus fallos aunque de forma más eficiente.[1]
    Esto es porque los adultos aprenden más por convicción e incluso por necesidad ya que pueden requerir los conocimientos para su trabajo, o para alguna actividad en específico por ello es que aprenden más eficientemente de sus errores, y saben perfectamente que el aprendizaje es responsabilidad suya. A diferencia de lo que pasa con los niños y jóvenes, mismos que en muchas ocasiones acuden a la escuela porque sus papás los envían y no tanto por convicción propia o porque tengan la necesidad de ciertos conocimientos. Todo esto lleva a que existan dos corrientes educativas según el tipo de estudiantes, la pedagogía para los niños y jóvenes y la andragogía para los adultos.

    Evaluación

    La evaluación es un proceso que procura determinar, de la manera más sistemática y objetiva posible, la pertinencia, eficacia, eficiencia e impacto de las actividades formativas a la luz de los objetivos específicos. Constituye una herramienta administrativa de aprendizaje y un proceso organizativo orientado a la acción para mejorar tanto las actividades en marcha, como la planificación, programación y toma de decisiones futuras.
    Lo que no debe hacer la evaluación es categorizar. La categorización del conocimiento impide reconocer de manera efectiva el avance en el proceso de enseñanza-aprendizaje, al enmarcar por episodios la capacidad intelectual del aprendiz. Tampoco debe generalizar. Así como todo conocimiento es diferente, todo proceso que conlleva a él es diferente de persona a persona, es decir, todos aprendemos de manera diferente, no debemos generalizar, aunque sí establecer criterios. Tampoco es calificar: asignar a un número no significa conocimiento, entonces, evaluar no es calificar.
    La evaluación nos ayuda a medir los conocimientos adquiridos, y nos proporciona información de los avances de los mismos con la finalidad de conocer si se están cumpliendo o no los objetivos propuestos.[2] La evaluación en tecnologías es sistemática y constante no se debe evaluar por el proyecto terminado sino por el esfuerzo realizado y en un mayor concepto las competencias que se adquieren según el plan de estudios 2006 de secundariaEn tecnologías es recomedable emplear la lista de comprobación, esta es una lista escrita de criterios de desempeño, puede utilizarse unas veces para diacnosticar los puntos fuerte y débiles, así como los camb ios de desempeño, esta lista no permite registrar los matices del desempeño. Con una lista de comprobación puede resumirse el desempeño estableciendo criterios de calificación o calculando el porcenaje de los criterios cumplidos.
    La evaluación educativa es un proceso sistemático y dirigido, en el cual intervienen una serie de elementos, por ejemplo: un ensayo o práctica en la formación profesional, una representación teatral en una escuela, un proyecto integrador, una prueba de ensayo en el aprendizaje informático, etc.
    Estos elementos nos permiten determinar si un sujeto ha alcanzado todos los objetivos planteados, propiciando con ello un cambio en su actitud de una manera significativa.

    En la actualidad, los mejores sistemas de enseñanza están al servicio de la educación, y por consiguiente, deja de ser un objetivo central de los programas educativos la simple transmisión de información y conocimientos.
    También se podría decir que existe en algunos la necesidad de capacitar al alumnado en el autoaprendizaje, como proceso de desarrollo personal. Cada alumno es un ser único, lo que muestra un elemento clave dentro del proceso de la evaluación: no evaluar nada más por evaluar, sino para mejorar el aprendizaje y para la organización de las tareas, entre otros aspectos metodológicos. Bajo la perspectiva educativa, la evaluación debe adquirir una nueva dimensión, y de esa manera darle un sentido de pertinencia a la enseñanza-aprendizaje.
    La evaluación puede conceptualizarse como un proceso dinámico, continuo y sistemático, enfocado hacia los cambios de las conductas y rendimientos, mediante el cual verificamos los logros adquiridos en función de los objetivos propuestos. Y es éste para el docente el perfeccionamiento de su razón de ser.

    miércoles, 2 de noviembre de 2011

    Elaborar un mapa conceptual del tema y entregarlo el lunes 7 y martes 8 de Noviembre de acuerdo con su horario de clases a mas tardar, en computadora con los 4 requisitos

    Cibercafe

    Cibercafé
    De Wikipedia, la enciclopedia libre
     Un cibercafé (de ciber- y café), ciber café o café Internet es un local público donde se ofrece a los clientes acceso a Internet y, aunque no en todos, también servicios de bar y/o restaurante y/o cafetería. Para ello, el local dispone de computadoras y usualmente cobra una tarifa fija por un período determinado para el uso de dichos equipos, incluido el acceso a Internet y a diversos programas, tales como procesadores de texto, programas de edición gráfica, videojuegos, copia de CD o DVD, etc. Otros locales que ofrecen ordenadores con internet, pero sin servicios de cafetería son los locutorios.
    Los cibercafés han contribuido de forma considerable a la masificación de Internet, especialmente en comunidades de bajo poder adquisitivo, en las que los individuos no pueden soportar el costo de un computador y del acceso a Internet en sus hogares.

    Historia
     
    Los primeros cibercafés fueron abiertos en Londres (Inglaterra) en 1994. El primer café fue el Café Cyberia, que abrió sus puertas en septiembre de 1994. Su fundadora, Eva Pascoe, dice que la idea se le vino a la cabeza a principios de los años 1990, cuando pasaba mucho tiempo lejos de su familia trabajando en su tesis doctoral. En esos tiempos, era de las pocas personas que tenía acceso a una cuenta de correo electrónico, servicio puramente académico por aquellos días; pero al no tener nadie más en su familia una dirección de correo electrónico, debía gastar cantidades considerables de dinero en cuentas telefónicas.
    Un día, sentada en un café cerca de su universidad, pensó que podría ser divertido poder ir a ese establecimiento con su ordenador portátil y enviar correos mientras se tomaba un descanso en su rutina habitual. Echó un vistazo alrededor y pudo reconocer algunos amigos de los que sabía que tenían conexión a Internet desde sus casas. Después, hablando con ellos, pensaron en cómo sería tener conexión permanente a Internet desde un café y pagar una pequeña tarifa para poder intercambiar mensajes con sus amigos y familiares, enviar correo y tener mensajería instantánea. Tres meses después, en septiembre, abrieron el primer café Internet en Londres. Desde ese momento hasta ahora, los cibercafés se han multiplicado por todo el mundo

    El cibercafé como negocio

    En la actualidad, gracias a la masificación de Internet en muchos países, los cibercafés se han convertido en negocios muy populares. Sin embargo, la sobreoferta, la competencia desleal y la caída de los precios han hecho que el sector haya sufrido una importante crisis, razón por la cual muchos negocios se han visto abocados al cierre.
    Otra circunstancia que ha puesto en la mira de las autoridades a los cafés Internet es el aumento de delitos informáticos realizados desde estos sitios de acceso público, donde se dificulta el control del usuario. Además, con el acceso libre a páginas pornográficas sin tener filtros adecuados para menores de edad, se ha impuesto la moda de las cabinas privadas lo cual propicia aún más el acceso a éstas páginas.
    En algunos países como Turquía, China, Cuba o Arabia Saudita, los cafés Internet están duramente regulados para prevenir que sus ciudadanos se comuniquen libremente y accedan a información del exterior sin restricciones. Se obliga a la aplicación de estrictos filtros y se realizan controles de censura gubernamental.

    Tipos de cibercafés

    Según el local y la clientela que lleva asociada, pueden distinguirse varios tipos de cibercafés. Cada uno de ellos requiere un equipo informático diferente, así como distinto nivel de mantenimiento y conocimientos para poder gestionarlo

    Enfocado hacia el uso de Internet
    Disponen de ordenadores para poder navegar por Internet en un ambiente generalmente tranquilo y relajado.
    Los equipos no tienen que ser tan potentes como en el caso anterior, pero deben configurarse adecuadamente para impedir un mal uso de éstos, como instalación de programas que puedan causar daños al equipo.
    Se aconseja no conectar más de ocho cámaras web para el uso de videoconferencia. Si se desea una buena calidad, es necesario contratar ADSL de, al menos, 2 Mbps. Si excede el número de ocho personas utilizando videoconferencia, al ocupar gran parte del ancho de banda de subida todos los accesos a Internet y la carga de las páginas web se volverán lentos.
    Este tipo de local orienta el negocio a un público universitario o a extranjeros. Es el complemento ideal a los locutorios, pues ambos compiten por el mismo público objetivo. Los ordenadores son más baratos y permite tener a cargo del cibercafé a una persona menos calificada.
    Este tipo de cibersala es el que está sustituyendo a los salones recreativos, donde se reúnen los jóvenes, que suele ser el público que mayor desgaste hace en el material informático.
    Es recomendable el máximo nivel de protección posible.

    Clientes

    Hoy día, los mayores usuarios de los cibercafés son los jóvenes que suelen reunirse en ellos para acceder a videojuegos en red. También son frecuentados por gente que tiene controlado el acceso a Internet en su trabajo y no tiene alternativas de consulta en sus hogares, por estudiantes y padres que requieren asesoría en búsquedas de información, por viajeros que encuentran en los cibercafés la posibilidad de tener una vía para comunicarse con sus familiares y amigos y por cualquier otra persona que requiera acceso a Internet y sus servicios de forma rápida y barata.
    En algunos países, los cibercafés reúnen comunidades de amigos los fines de semana por la noche, como alternativa de ocio a la ingesta de alcohol, pues sus horarios liberales se suelen extender hasta altas horas de la noche.

     Café en los cibercafés

    Aunque en muchos países el concepto de café propiamente dicho no es la constante, todavía hay muchos de estos negocios que permiten la venta y consumo de comida y bebida, incluido el café. Tal vez el nombre de café viene asociado a los antiguos cafés, donde la gente se reunía para intercambiar opiniones con sus amigos y conocidos, y como tal es sólo una evolución natural favorecida por la tecnología. Muchos cibercafés se llaman así aunque no vendan ningún alimento ni tampoco ninguna bebida.

    Software de administración

    Para la administración y el control de un cibercafé se puede encontrar software libre o comercial, lo cual permite gestionar, administrar el tiempo de uso, manejar stock de productos, bloquear equipos y manejar la contabilidad. Además permite llevar una base de datos de clientes de los que asisten con mayor frecuencia, al recibir beneficios por cada promoción y hacer mercadotecnia de fidelización

    ELABORAR UNA SIPNÓSIS DE LA TRAMA DE LA PELICULA PARA ENTREGARLO EL DIA JUEVES 4 Y EL VIERNES 5 DE NOVIEMBRE DESPUES DE ESAS FECHAS NO SE RECIBIRA NINGUN TRABAJO.DEBE DE CONTENER LOS 4 REQUISITOS ESENCIALES

    jueves, 25 de agosto de 2011

    DINAMISMO DE SOCIALIZACIÓN Y SUS FORMAS.

    1. Introducción


    El constante desarrollo de las sociedades avanzadas hace necesario un esfuerzo permanente de reconceptualización de aquellos fenómenos que se dan en su seno; no podemos eludir el compromiso científico de estar atentos a los nuevos fenómenos sociales y las consecuencias que tienen en el desarrollo individual del sujeto y en su educación. La definición de colectivos que por sus características propias y contextuales se encuentran en situaciones de riesgo social es una de las que más afectada se ve por estos fenómenos de cambio social, ya que los cambios estructurales, socioeconómicos y culturales son los que definen sus procesos de socialización delimitando, a su vez, las dificultades que se pueden encontrar,

    Concretamente, dentro del vertiginoso dinamismo de las sociedades avanzadas, se están dando importantes cambios y apareciendo situaciones hasta ahora desconocidas, que afectan directamente a la correcta socialización de nuestra infancia. El colectivo que se recoge bajo el epígrafe de infancia en situación de riesgo se suele definir como un grupo en proceso de desadaptación social por causas básicamente familiares. Si hacemos un rápido repaso a las diferentes orientaciones teóricas que definen las situaciones de riesgo social veremos como el énfasis siempre recae en las circunstancias familiares.

    Así, el enfoque socio-ambientalista acentúa la importancia de los factores ambientales y sus programas de intervención hacen hincapié en los apoyos a las familias cuando analiza este fenómeno. El enfoque conductista, en cambio, se centra en la idea que las situaciones de riesgo están causadas, fundamentalmente por las dificultades de los padres en desarrollar su rol parental y en cubrir las necesidades básicas de sus hijos; por otro lado las perspectivas psico-dinámicas ven la conducta como algo sintomático causado por experiencias pasadas que mucho tienen que ver con las habilidades afectivas familiares. Por último, el enfoque sistémico parte de la premisa de que el individuo con problemas forma parte de un sistema, básicamente familiar, con dificultades (Guasch, M. y Ponce, C. , 2002).

    Por lo tanto, tal y como se observa, los enfoques teóricos que abordan la epistemología de la infancia en situación de riesgo se centran en la situación familiar, identificando las causas y los factores de riesgo en el microsistema familiar: la desestructura familiar, los maltratos infantiles familiares, la dinámica conflictiva entre padres e hijos, la ausencia o el exceso de disciplina, la negligencia o la ausencia de lazos afectivos,... son algunos de los factores que se han identificado como causa de la desadaptación social.

    Lógicamente, la fuerza socializadora de la familia es tal, que no se puede negar que todos estos factores tienen una influencia directa sobre los procesos de desajuste entre el sujeto y la sociedad. Sin embargo, las preguntas a plantear son, ¿solo la familia puede reunir indicadores que explican las situaciones de riesgo?, ¿existen otras situaciones, fuera de la familia, que provocan la aparición de poblaciones infantiles en situación de riesgo social?¿se puede hablar de infancia en situación de riesgo social cuando no existen maltratos o negligencia en la familia? En definitiva, ¿las sociedades desarrolladas y avanzadas son el escenario de nuevos grupos de riesgo social?

    2. Hacia una reconceptualización de la infancia en situación de riesgo social


    Efectivamente, las sociedades avanzadas han generado nuevos escenarios y nuevas problemáticas en la socialización de la infancia, provocando una multiplicidad de factores que pueden hacer aparecer de grupos de riesgo hasta ahora inexistentes. La reconceptualización del concepto, por lo tanto, debe pasar por la amplitud de mira hacia esas nuevas problemáticas sociales que provocan que niños y niñas que crecen en entornos familiares normalizados puedan verse inmersos en procesos de desadaptación o exclusión social por otras causas. Veamos cuales podrían ser los tres parámetros básicos que nos pueden hacer llegar a una definición más amplia.

    En primer lugar, cabe destacar la importancia del medio en cualquier proceso de riesgo social y de desadaptación; para definir esta población cabe describir las situaciones carenciales que suelen caracterizar la familia y el entorno social inmediato de los niños. Un niño está en riesgo social si pertenece a un entorno que presenta factores de riesgo. En el reciente informe sobre "La infancia i les famílies als inicis dels segle XXI", se plantea estudiar el riesgo social a través de indicadores situados en la familia, en el sujeto y en sus entornos. (Gomez-Granell, Garcia-Mila, Ripol-Millet y Panchon, 2002).

    En segundo lugar, también destacar la importancia de la interacción del niño con ese medio; la situación carencial entra en relación con las características personales del niño, de tal manera que se van generando respuestas activas en él y consolidando consecuencias en su socialización y sus características personales, cognitivas y afectivas. En tercer lugar, la consideración de la situación de la infancia en riesgo como una parte de un proceso hacia situaciones de inadaptación social.

    Así, podemos considerar que la infancia en situación de riesgo social es aquella que establece, de forma procesal y dinámica, una interacción ideográfica e inadecuada con sus entornos, los cuales no cubren sus derechos inalienables, poniendo en peligro su correcto desarrollo y dando lugar a un posible inicio del procesos de inadaptación social; y sus entornos ecológicos son la familia, la escuela, el barrio, el vecindario, las instituciones,...

    De tal manera que cuando nos referimos a infancia en situación de riesgo social no solamente nos referimos al maltrato dentro de la familia, sino a una situación mucho más amplia, que reúne todas aquellas circunstancias sociales carenciales para el correcto desarrollo de la infancia. (Balsells, 1997).
    ¿Y cuales son esas situaciones carenciales, alejadas de las causas familiares? Todas aquellas que se generan en los diferentes agentes de socialización de la infancia como por ejemplo el maltrato entre iguales, el builling, el maltrato en el deporte, a través del consumo, del urbanismo y diseño de las ciudades..situaciones generadas en el seno de las sociedades del bienestar y que han sido "bautizadas" como las nuevas formas de maltrato infantil: "Se trata de circunstancias alejadas de los "habituales malos tratos" pero que día a día van cobrando más significación, principalmente por sus repercusiones en sectores de población aparentemente alejados del maltrato infantil" (Petrus, 1997, 26).

    3. ¿Como detectar a la nueva infancia en riesgo social?


    Atendiendo a una reducción de los problemas de la infancia a los maltratos en la familia, el análisis de perfiles individuales de situaciones de riesgo para la infancia ha estado marcada por el estudio de indicadores que hacen prever la existencia de situaciones de máxima desprotección de los niños; es decir, por el análisis y la descripción de situaciones de maltratos y de negligencia. A través de indicadores, físicos y comportamentales en los niños y conductuales en los padres se pueden identificar situaciones de maltratos o de emergencia de esta situación. En base a la existencia de estos indicadores se inician los procesos de intervención individualizados, de prevención secundaria o terciaria, y en base a los factores de riesgo relacionados con la emergencia de los maltratos se identifican poblaciones de riesgo para poder hacer una prevención primaria. Este es el esquema usado en la intervención con la infancia maltratada en el seno familiar y autores como Gracia y Musitu (1993), Belsky (1980), De Paul (1996), Casas (1989), Arruabarrena (1996), entre otros, le han aportado rigor científico.

    En esa misma línea, desde los servicios sociales de protección a la infancia, el análisis de situaciones de riesgo se hace en base a listados de indicadores de riesgo social que recogen los anteriores y, en ocasiones, son completados con otros relacionados con la emergencia de situaciones de inadaptación social. La Generalitat de Catalunya, la Diputación de Zaragoza o autores como Inglés (1993), Cusó (1995) o Panchón (1995) trabajan en este sentido.

    La detección operativizada desde esta forma es perfectamente válida cuando se quiere centrar la protección de la infancia ante situaciones de maltrato infantil familiar en cualquiera de sus formas: maltrato físico, abuso sexual, negligencia, maltrato emocional o abandono.
    Sin embargo, la cuestión que aquí se plantea es como formalizar un sistema de detección igualmente válido pero que abarque estas situaciones emergentes en nuestra sociedad y que se sitúan fuera de la responsabilidad paterna clásica. Es decir, encontrar un instrumento que nos permita estudiar estas situaciones contextuales que ponen en peligro el desarrollo de la infancia que se pueda adaptar a todos los contextos y escenarios ¿Cuales son las características de los entornos escolares, sociales, del grupo de iguales,... que favorecen las nuevas situaciones de riesgo? ¿Cuales son los factores y los indicadores en estos casos? , ¿Cuáles son las características que nos indican que un niño o niña está sufriendo alguna nueva forma de maltrato infantil?

    Por ejemplo, ¿la situación de refugiados de guerra o de inmigrantes permite que la infancia tenga la misma calidad de vida que si no hubieran tenido que abandonar su país de origen, en el que tienen sus raíces, su familia y en el que pueden hablar su idioma? O bien, ¿un niño víctima de maltrato, abuso y acoso emocional por un compañero del colegio, puede desarrollar su autoestima y seguridad emocional de igual forma que otro que no lo padezca?

    Actualmente, el Instituto Infancia y mundo urbano (www.ciimu.org) está elaborando un sistema de indicadores orientados a la evaluación del bienestar de la población infantil y juvenil que permita representar y conceptuar la realidad actual de esta población.
    Otra propuesta válida para el objetivo planteado es utilizar un instrumento desarrollado desarrollada en España por López, Fuertes Zurita, López Gómez de Cádiz, Sánchez Redondo y Merino (1995), en el Programa de mejora del Sistema de atención social a la infancia del Ministerio de Asuntos Sociales: la teoría de las necesidades de la infancia se basa en una taxonomía de necesidades fundamentada en las diferentes formulaciones de los derechos de los niños y las niñas. Esta nueva forma de análisis de situaciones que implican riesgo para el desarrollo integral permitirá operativizar nuevos indicadores.

    De hecho, la utilización de la Convención de los Derechos de la Infancia como punto de referencia para realizar evaluaciones de este tipo, a través de la Taxonomía de las Necesidades Básicas, permite trasladar el criterio político y social hasta un criterio técnico y científico bajo la bandera de la universalidad. Sin embargo, es innegable la dificultad que entraña medir el grado de riesgo para la infancia de una situación, ya que es una acción impregnada de componentes culturales y éticos. La importancia de este hecho radica en las decisiones posteriores que afectarán a la vida de estos niños y niñas, ya que en función de la gravedad de su situación se determinará la acción de protección más adecuada y ésta puede llegar a ser su separación del núcleo familiar. ¿Cómo neutralizar los componentes culturales, la subjetividad del evaluador, o las diferencias establecidas desde las tradiciones? Sin duda este es un interrogante todavía sin respuesta que queda pendiente en la propia definición de la infancia en situación de riesgo social, y aunque el utilizar como referencia la Convención de los Derechos de la Infancia es de por si un gran adelanto, todavía queda mucho para llegar un aceptable grado de intersubjetividad.

    Desde este Programa se describen tres grandes bloques de necesidades: las de carácter físico biológico, las de carácter cognitivo y las necesidades emocionales y sociales. Esta taxonomía de necesidades infantiles permite analizar aquellas situaciones en que, si bien no se da maltrato infantil, si que representan una situación de necesidades no cubiertas. Este planteamiento permite la mejora del bienestar de la infancia de forma más amplia que desde la teoría de las carencias, y también permite identificar no solo las situaciones familiares, sino también aquellas del entorno ecológico de los niños y niñas que pueden poner en riesgo su desarrollo, hasta dar paso a situaciones de desadaptación.
    En definitiva, tiene en cuenta una perspectiva ecológica y interactiva, que valora todos los entornos sociales del niño, así como su interacción, y puede servir al objetivo planteado en este texto. El siguiente cuadro refleja todas las necesidades básicas, así como las situaciones correspondientes consideradas de riesgo:


    Cuadro I: Taxonomía de las Necesidades Básicas: (Adaptación: López, y otros, 1995)

    4.- Los nuevos colectivos en situación de riesgo social


    Partiendo de la base que son estas necesidades las que cualquier menor debe tener cubiertas para desarrollarse de forma integral, podemos empezar a operativizar y a definir situaciones que están emergiendo en las sociedades más desarrolladas, y que plantean nuevas situaciones de riesgo social. Se trata de situaciones en las que la infancia puede tener una familia que cumpla sus funciones parentales, pero que tiene algún otro entorno ecológico, que forma parte de su socialización secundaria, y que por acción u omisión no cubre sus necesidades. El siguiente cuadro resume dicha relación a través de algunos ejemplos de nuevos colectivos en situación de riesgo social.


    Cuadro II: Nuevos grupos de infancia en situación de riesgo social

    4.1.- El maltrato entre iguales

    El maltrato entre iguales ha sido definido como "un comportamiento prolongado de insulto verbal, rechazo social intimidación psicológica y/o agresividad física de unos niños hacia otros que se convierten, de esta forma, en víctimas de sus compañeros" (Olweus, 1993).

    Por lo tanto, se trata de una forma de maltrato activo que se da dentro del microsistema y la microcultura propia del grupo de iguales, en la que se producen daños físicos y psicológicos a través de un uso indiscriminado y deshonesto del poder.

    Este fenómeno, que se suele dar en el marco escolar, pero que también se puede generar en otros contextos (las pandillas de la calle, en los recursos de tiempo libre,...) constituye una clara situación de riesgo social fundamentalmente para las víctimas, pero también para los agresores y los observadores. Todos ellos están haciendo un aprendizaje social y construyendo un esquema de socialización, en el que los límites del poder están en la agresividad y la prepotencia, alterando cualquier esquema normalizado de dominio-sumisión.

    Las necesidades básicas de la infancia que padece esta situación quedan alteradas y son vulneradas en mayor o en menor medida, según la gravedad del maltrato; efectivamente, si existen agresiones físicas del tipo pegarse entre compañeros o agredir con algún tipo de instrumento (navajas, palos,...) nos encontramos ante una situación en que la protección de riesgos reales está descubierta ya que la integridad física de las víctimas no está garantizada.

    La necesidad básica de comprensión de la realidad física y social consistente en la transmisión y asimilación de las actitudes y los valores prosociales también se ve claramente alterada: los códigos morales que son aprendidos en un contexto de maltrato entre iguales sitúan en una clara situación de riesgo social a víctimas, agresores y observadores del fenómeno. Los efectos de una socialización enmarcada en estos parámetros son claros factores de riesgo para la desadaptación social.

    Cuando se da cualquier forma de maltrato entre iguales, ya sea el maltrato físico, el psicológico (insultos, amenazas, desprecios, propuestas de tipo sexual, ignorar, ofender,... ) o ambos, son las necesidades de seguridad emocional y de tener una red de relaciones sociales las que siempre quedan descubiertas. La creación de la autoestima, tan relacionada con vivir y crecer en un clima de aceptación, se ve minada:

    " Si la microcultura de los iguales incluye claves simbólicas de dominio y sumisión interpersonal, y la realidad cotidiana de la relación incluye el desprecio, la falta de consideración y, finalmente, los malos tratos, el grupo de iguales pasa a ser un espejo en el cual ir observando el crecimiento de uno mismo/a, a convertirse en un espejo roto en mil pedazos, en el cual se aparece desfigurado y fragmentado en la identidad propia y dañado en la autoestima, existiendo riesgo de enfermedad psicológica. " (Ortega, 1998, 39)

    Finalmente, para el desarrollo integral de la infancia el establecimiento de relaciones de amistad y de compañerismo es una pieza clave que permite la paulatina creación de actitudes positivas hacia los individuos en pro a la sociabilidad de los mismos. El peligro ante estas situaciones de maltrato entre iguales es que se integren patrones y actitudes que van a encaminar hacia una vida social distorsionada.

    4.2.- La violencia escolar

    La violencia escolar es un fenómeno que ha ido surgiendo en los países occidentales más avanzados y que cada vez preocupa más. El estudio de sus causas, consecuencias y de las posibles soluciones está ocupando un lugar importante en la investigación y la publicación científica.; este fenómeno ha sido denunciado por los medios de comunicación cuando se ha llegado a casos extremos y llamativos, pero sin embargo se puede dar en diferentes formas y grados, y todas ellas perturban el buen funcionamiento educativo de la institución escolar.

    La violencia escolar reúne bajo su epígrafe una serie de conductas diversas y prolongadas en el tiempo que dificultan y alteran la convivencia de la comunidad educativa, siendo provocado por un alumno que es apoyado por el grupo, y mantenido por el resto, los cuales son pasivos o ignorantes de los hechos ((Díaz-Aguado, 1999). Adaptando la clasificación de (Fernández, 1998) podríamos decir que existen diferentes formas de violencia escolar: los actos disruptivos son aquellos que se suelen dar dentro del aula y que generan un clima y un ambiente poco propicio para cumplir con las funciones educativas (llegar tarde, no hacer los deberes, hablar mientras el profesor explica, malas posturas, fumar, comer, hablar o enviar mensajes con el móvil, estar despistado,...). Se trata de actos del alumnado muy relacionados con la indisciplina escolar que generan un fuerte malestar docente; esta forma de violencia escolar es la menos grave pero sin duda la que más se da en nuestro entorno inmediato. Otra tipología es la violencia propiamente dicha, que se puede dirigir a profesores (insultos, dañar coches, agresiones, burlas,...), a alumnos (seria el maltrato entre iguales), a bienes (robar material escolar, romper instalaciones, quemar material, inutilizar cerraduras,) o a la institución (absentismo, faltas injustificadas, rechazo escolar,...). Esta violencia puede ser física, verbal, psicológica o indirecta.

    Ayerbe (2002) plantea una panorámica de algunas de las explicaciones sociales y escolares de la violencia escolar: prolongación de la escolaridad obligatoria, la integración laboral, la normatividad y justicia, la segregación escolar y las vivencias de los alumnos.

    En cualquiera de sus formas y en cualquiera de sus diferentes intensidades, la violencia escolar genera un grado de desprotección de la infancia que se concreta fundamentalmente en la localización de factores de riesgo referentes a sus necesidades cognitivas y sociales.

    La institución escolar tiene una clara función relacionada con el desarrollo de las habilidades y capacidades cognitivas de la infancia y la adolescencia, con la finalidad de formar sujetos que se puedan integrar en la sociedad de forma positiva. Esto conlleva un trabajo de transmisión de valores de tolerancia y de respeto hacia los otros, independientemente de su raza, nacionalidad o sexo, así como de respeto a los bienes materiales propios y comunes. Sin embargo, cuando la institución escolar se convierte en el escenario de la violencia escolar, se esta dando un claro riesgo que la construcción social del individuo sea en base al racismo, al dogmatismo, a la ley del silencio y/o a la ley del más fuerte. Los valores antisociales que existen detrás de cualquier forma de violencia pueden convertirse en los referentes de los alumnos que los están viendo, asimilando y sufriendo día tras día. Todo ello sin olvidar que también conlleva un perjuicio respecto a las necesidades sociales propias de las edades escolares.

    ¿Un niño que observa de forma constante como sus compañeros insultan a los profesores tiene las mismas posibilidades de aprendizaje social que otro que vive en un clima positivo de convivencia escolar? ¿Una niña que protagoniza capítulos habituales de insultos y burlas machistas, está recibiendo una correcta socialización secundaria? En definitiva, ¿es posible afirmar que los actos disruptivos, así como la violencia escolar más grave son factores de riesgo de la desadaptación social? Parece ser que la respuesta es afirmativa, poniendo sobre la mesa la necesidad de hacer actuaciones multidimensionales en situaciones de riesgo social que se dan fuera de los entornos familiares.

    4.3.- Movimientos migratorios

    La llegada a los países europeos de ciudadanos de países en vías de desarrollo que no se pueden ganar la vida en su país de origen es uno de los fenómenos sociales que se está viviendo con más fuerza y más dificultades en la actualidad: políticos, legisladores, responsables educativos, actores sociales,... todos ellos están en vías de analizar la situación y sus posibles soluciones.

    En relación a la infancia que vive los movimientos migratorios nos encontramos con casuísticas diferentes; por un lado está el/la hijo/a del emigrante que forma parte de una familia que no se separa y se traslada toda junta a un país desarrollado; también encontramos niños/as que ven como su familia se tiene que separar porque el padre o la madre emigran a otro país; o también el caso de adolescentes que emigran solos a un país europeo con la esperanza de encontrar trabajo. En todos estos casos, así como en el resto de situaciones producidas por la emigración, nos encontramos ante una problemática social que genera una situación de riesgo para la infancia que la vive.

    Cualquier menor que ha tenido que dejar su país de origen y llegar a otro donde la lengua, las costumbres, los usos y los valores nada tienen que ver con los propios, se encuentra en una situación de desventaja social en relación a las posibilidades de adaptarse de forma ajustada. La vulneración de sus derechos relacionados con las necesidades sociales es evidente cuando se piensa en las posibilidades de establecer una red de relaciones sociales: el plano de igualdad es difícil de encontrar en el grupo de iguales cuando no compartes lengua, soportar actitudes racistas y xenófobas por el simple hecho de no ser autóctono o no poder celebrar las fiestas religiosas propias, son algunos ejemplos del aislamiento social que pueden vivir estos/as niños/as.

    Sin embargo, la vertiginosa evolución de la sociedad en la que vivimos, hace que los movimientos migratorias vayan provocando nuevas situaciones a cada momento. La emigración es una realidad cambiante en si misma: ello nos obliga a estar atentos a las nuevas situaciones de riesgo que se puedan generar.

    Un ejemplo de ello es el colectivo de adolescentes emigrantes que están desamparados; se calcula que en la ciudad de Barcelona existen 300 menores de edad magrebíes que viven en la calle. Son chicos/as que emigran sin su familia a nuestro país con la esperanza de encontrar trabajo, pero lo hacen sin documentación, sin tener la edad necesaria para incorporarse al mundo laboral y, por su puesto, sin calificación profesional. Ello ha generado un colectivo en riesgo social caracterizado por la movilidad geográfica, un desarraigo social y familiar, sin identificación y que cometen pequeños delitos para sobrevivir en el país que les acoge.

    La sociedad no ha estado preparada para dar respuesta al cubrimiento de las necesidades básicas de este nuevo colectivo en riesgo, ya que ha aparecido de forma muy reciente. Así, estos menores, que en el mejor de los casos eran declarados desamparados para ser tutelados y protegidos por la Administración, en la mayoría de los casos rechazan esta tutela huyendo de centros de acogida que están pensados y organizados para un tipo de menores de características y expectativas muy alejadas a las suyas. Definitivamente, se han tenido que crear nuevos recursos para atender a este nuevo colectivo.

    4.4.- Los mass media

    "los mass media aparecen como centros difusores de cultura, haciendo tambalear los cimientos del centro difusor de cultura por excelencia, la escuela. Ésta ha perdido el monopolio de la transmisión cultural y sus alumnos se nutren ahora en los mass media, ya que la escuela se ha visto imposibilitada para integrar las formas culturales contemporáneas a las que, por otra parte, ya está adheridos los alumnos" (Salinas, 1992:253)

    En esta cita se resalta la importancia que en la actualidad tienen los medios de comunicación como transmisor de las concepciones de los grupos dominantes de la sociedad, y más concretamente la televisión. La televisión ha impuesto nuevas pautas de vida cotidiana, hasta el punto que es un miembro más de la familia, y en función de la que se decide los horarios domésticos.

    Con relación a la infancia en riesgo social, se ha estudiado la televisión como un medio de comunicación que favorece determinados aprendizajes que pueden convertirse, si su uso no es el correcto, en un entorno socializador de riesgo. El consumismo y la violencia que transmiten son dos de los contenidos más estudiados.

    El consumismo, a través de la publicidad que relaciona la adquisición de determinados productos con el éxito social y personal, favorece los sentimientos de frustración de determinados sectores de la población con poco poder adquisitivo.

    "Continuamente el discurso del consumo apela a las motivaciones psicológicas de las personas para activarlas, potenciarlas y asegurar que con la adquisición de objetos se verán satisfechas: la seguridad, el poder, el sexo, la autoafirmación, la aprobación de los demás,... Sin embargo, la insatisfacción es permanente puesto que el número de objetos a poseer nunca deja de crecer y aumentar, y es imposible de alcanzar" (Pérez, 1992,123)

    La violencia en la televisión y el estudio de las consecuencias en la agresividad y las conductas violentas de los niños también es frecuente y llega a conclusiones que relacionan una y otra variable en función de otras características. Un reciente estudio de la Universidad de Michigan, desarrollado durante 15 años, ha llegado a la conclusión que los/as niños/as que ven programas violentos en televisión están más predispuestos a protagonizar actitudes y respuestas agresivas cuando son adultos. A su vez, autores como por ejemplo Petrus (2001) han denunciado la capacidad de modelling de los mass media como una de las causas de que los escolares adopten como propios, patrones de conducta violentos y agresivos. Resulta contradictorio que la sociedad actual, con el uso y abuso de la televisión, pretenda cubrir la necesidad básica de comprensión social; la contradicción radica en el mismo contenido de los programas televisivos: actitudes violentas, agresivas, racistas, sexistas,. Frente a los contenidos y los valores que esa misma sociedad dice y reclama que se transmitan a través de la familia, la escuela o los centros educativos no formales.

    En definitiva, la aparición de nuevas poblaciones en riesgo de exclusión, desadaptación o inadaptación social, tiene mucho que ver con las características y los medios de socialización secundaria que se van generando en las sociedades avanzadas; prevenir sus consecuencias y la consolidación de las mismas, requiere un esfuerzo multidimensional e interdisciplinar, en actuaciones planteadas desde el modelo ecológico y la acción por redes, dado que todos los entornos son la causa y, a su vez, la solución. La complejidad d del fenómeno requiere actuaciones globales que abarquen medidas políticas, legales, escolares, familiares, Tal y como se plantea en la declaración de Copenhague de 1995 sobre el desarrollo social, la sociedad debe ser sensible al desarrollo y el bienestar social de todos los sectores sociales, y de forma particular de la infancia que vive situaciones vulnerables.
    Elaborar un mapa conceptual del tema, debe tener los requisitos obligatorios, en computadora, entragar la última clase de la 3er. semana de clases.